lunes, 15 de octubre de 2007

CRÓNICAS DE ESTAMBUL : DIA 1

No las tenia todas conmigo al coger el primer vuelo de Alitalia rumbo a Estambul haciendo escala en Roma, pero la verdad es que el vuelo transcurrió sin ningún inconveniente y con los horarios adecuados, ni retrasos ni problemas de ningún tipo en cuanto a pérdida de maletas, cosa que siempre es de agradecer. No se nos hizo especialmente largo debido a que nuestros dos anteriores vuelos habian sido de más de 11 horas, asi que 3 horas y pico en total con una escala intermedia pasó bastante rápido. Nada más llegar al aeropuerto de Estambul nos dirigimos a la ventanilla de obtención del visado, que son 10 euros, te ponen la pegatina en el pasaporte y tirando. Lo que fue un poco desesperante vino después, se formó una cola importante en el paso por la aduana esta que te miran el pasaporte, y encima en nuestra ventanilla nos tocó un tio que se tiraba, sin exagerar, 5 minutos mirando una y otra vez el pasaporte y nuestra cara, pero bueno, después de 30 min de espera ....al fin fuera. Lo primero que hicimos fue ir a la oficina de cambio, la cual aunque ya sabia que cobraban comisión y hay lugares mejores para hacer el cambio de moneda, me resultó más comodo y el perder 5 o 6 euros me daba igual la verdad, asi que cambiamos aquí nuestro dinero.
De inmediato fuimos a comer a un buffet libre del aeropuerto, más que nada para no ser el típico turista que lo primero que hace es acudir al McDonalds o Burguer King, lo que pasa que la verdad es que fue un robo en toda regla, no recuerdo el precio exacto, pero una porción de pizza, una coca cola y un yogurt me clavaron casi 15 euros, en fin, cosas de los aeropuertos.
Una vez acabamos salimos fuera a buscar el taxi, con la idea de regatear mucho. Yo habia leido que otros viajeros les habian cobrado unos 25 euros, cuando se podia sacar por 2o euros perfectamente, cuando le preguntamos a uno que habia alli el precio y nos dijo al cambio unos 16-17 euros, la verdad, ni regateamos ya, aceptamos porque siendo 4 era una miseria y veniamos cansados (yo no habia dormido nada la noche anterior).
El trayecto en taxi fue lo que esperabamos, velocidades considerables, poco respeto a las señales de tráfico, saltarse semáforos como lo más normal , e incluso coches por encima de la acera como un carril más de la carretera, jeje. Aunque habiendo estado en China, uno se acostumbra, no quiero ni pensar como debe ser en otros lugares como la India, jaja.
En unos 50 min (habia bastante tráfico siendo un sábado) nos plantamos en nuestro hotel, el Best Western The Presidente Estambul, el cual a pesar de no ser de gran lujo, para mi la verdad estaba perfecto, ningún problema, todo correcto, limpio y el servicio correcto. Aunque la verdad no soy muy elistista para estas cosas, disfruto igual en un alojamiento sencillo que uno más lujoso. Las habitaciones eran espaciosas, limpias, con moqueta en el suelo y una mesita con un sillón, la tele con varios canales internacionales (deporte, musica, incluso tve internacional) y el baño correcto, las vistas eso si, eran malas, a un edificio de enfrente, pero bueno, un mal menor.

Después de dejar todas las cosas en la habitación, fuimos a dar una vuelta por la zona donde nos alojabamos, que está en la zona más antigua de Estambul, donde se concentra el mayor número de monumentos y la historia más viva de la ciudad, en el triángulo Beyazit-Sultanhammet-Eminonu. Lo primero que hicimos, ya que nos quedaba a poco mas de 200 metros fue entrar al famoso Bazar de Estambul, un lugar con más de 4000 tiendas distribuidadas por decenas de calles y normalmente ordenadas por mercancia, aunque no se ajustaba del todo a esa regla.

La primera sorpresa, que luego se confirmó a lo largo del viaje, fue que en Estambul hay muchísimo turista español, te los encuentras por todas partes, y sobretodo sorprende el hecho que incluso los vendedores de las tiendas de gran parte de la ciudad entienden y/o hablan bastante bien el español (incluso alguno nos habló en catalán, y hubo más de un caso). Estos vendedores te acosan literalmente para que compres sus mercancias, siempre con un don especial para resultar simpáticos, cosa que les ayuda en la venta de sus productos claro. Un consejo, si vais en época de ramadán, como nos tocó a nosotros, id a comprar cuando anochece, parece que están de mejor humor para vender a mejor precio después de su ingesta diaria de comida, jeje.
No estuvimos mucho rato, porque lo queriamos dejar para los últimos dias, cuando el presupuesto del viaje se aclarara más y supieramos que comprar y a que precio.

Después de salir por una de las salidas norte del Gran Bazar de Estambul, fuimos paseando por unas calles muy viejas, las cuales la verdad tenian bastante suciedad, probablemente la ciudad más sucia que he visitado basándonos en esa zona antigua en concreto. También me dio la sensación de ser algo observado de una forma más intensa que en otros lugares de la ciudad, sobretodo si eres chica y los cuchicheos y miradas se vuelven descarados, pero bueno, ya hablaré de ese tema más adelante.
Fuimos bajando hasta salir a la plaza del Bazar de las Especias, el cual tampoco visitamos, ni tan siquiera entramos, porque lo dejabamos para otro dia, además de estar repleto de gente este sábado tarde-noche. Lo que si hicimos fue visitar la espéndida mezquita de Yeni Camii, cercana al puente de Gálata y construida hacia finales del siglo XVI, cuando unas mujeres del harén consiguieron el poder para construirla, encabezadas por obra y encargo de Safiye, la madre de Mehmet III. Antes de entrar nos compramos una torta recubierta de sésamo que vendian unos niños con un carrito en la calle, estaba muy buena la verdad y por un precio irrisorio de menos de un euro, nos la fuimos comiendo hasta entrar a la mezquita, y esquivando a los pesados que te acompañan 500 metros por la calle para venderte sus falsificaciones malísimas de perfumes aunque les digas 100 veces que no, menos mal que tengo paciencia y puedo decir que "no" 1000 veces sin perder los nervios, jaja.



Después de apreciar la gran belleza de la Yeni Camii, nos dimos un paseo por el puerto de Eminonu, de una gran vitalidad y lleno de vendedores, turistas, transeuntes de paso, o los cientos de pescadores que pueblan el puente de Gálata, que separa la zona antigua de la nueva.
Lleno de chiringuitos, es un lugar ideal para hacerse una idea de la vida diaria de la clase media de la ciudad, donde incluso podias comprarte un bocadillo de pescado, muy popular allí junto con las típicas comidas turcas tipo durum, kebabs, kofte, etc.


Después de eso, seguimos la calle del tranvia durante 30 min disfrutando de la calle más animada de la zona vieja, que lleva desde el citado puerto de Eminonu hasta nuestro hotel directo, pasando por zonas muy vivas y bonitas, con tiendas interesantes de recuerdos, el parque con la Santa Sofia y la Mezquita Azul (que se encuentran enfrente una de la otra como ya explicaré en la crónica del dia que las visitamos), la cisterna de la Basílica y restaurantes muy bonitos. Paramos a cenar en un local pequeño con un estilo muy casero, el cual nos convencieron de entrar dos chavales muy simpáticos (uno tenia algo raro en el ojo, yo creo que era de cristal, ni idea), a comernos un sabroso durum con nuestro refresco. Después de eso hicismo una parada a tomar algo en el Starbucks de nuestra misma calle, para descansar un rato y charlar antes de la llegada de nuevo al hotel a la noche, yo la verdad, estaba muerto literalmente de cansancio.
Llegamos a las 10 y pico, 11, sino recuerdo mal, de la hora turca, es decir, una hora menos en España, y aprovechamos para ver las vistas del restaurante al aire libre del último piso de nuestro hotel, que tenia unas bonitas vistas, sobretodo de noche con la Mezquita Azul iluminada, y también un poco para ver el restaurante interior que montan cada noche al lado de la piscina cubierta iluminada del mismo último piso.


Después de eso a dormir, que nos quedaban muchos dias y muy interesantes todos ellos.

PD: Cuando suba todas las fotos del viaje, y no solo las que vaya enseñando aqui en las crónicas pondré el enlace correspondiente a todas ellas.

6 comentarios:

Sipuga dijo...

Esta muy bien la cronica de tu viaje a Estambul.
Una pregunta, las mujeres van tapadas de la cabeza? Y las mujeres que van como turistas, se tienen que tapar?

Ivan dijo...

No, la inmensa mayoria de mujeres turcas visten igual que aqui más o menos, muy pocas van con el velo, y sobre las turistas..pueden vestir como quieran excepto para entrar a los lugares como mezquitas, que tienen que taparse los hombros y si llevas camiseta corta también la cintura. Para ambos sexos está el tema de las piernas, si llevas pantalón corto hay que taparse también, seas hombre o mujer, da igual. La cabeza tengo entendido que antes si, pero yo estos dias que he estado alli no he visto ninguna turista que le hagan taparse la cabeza.

Ramon dijo...

Curioso, imagino que al ser Turkia un país que quiere entrar en la UE, muchas cosas ya se han "normalizado" por decirlo de alguna manera en el aspecto cultural de la mujer.

Habían puestos de centollos también? XD

Louie83 dijo...

Buff no se yo si me hubiese comido yo esa torta XDDDD, jo pues no esta nada mal el hotel, y lo del trafico un peligro, pero bueno supongo que sera como aqui en Madrid, nadie respeta una señal XDDDD

Haber en las siguientes cronicas que te parecio la "Sofia" XDDD, seguro que es un lugar impresionante, de ese articulo si que no pierdo ni una foto XDD

Nos leemos cuidate.

Anónimo dijo...

Ramon, Estambul es la parte europea de Turquia, desde hace tiempo. Nunca han habido mujeres con velos en esa zona, no tiene nada que ver que quieran pertenecer a la UE.

Ademas, es cuestion de religion, la gente tiene unos principios, no van a cambiarlos solo para parecer mas europeos.

Laura dijo...

Estambul...que envidia (sana jeje).

Bienvenido al blog de Sexo en Nueva york!!

Un saludo