INGMAR BERGMAN

Antes de continuar subiendo las fotos del viaje a Japón, me debo en la obligación de hacer un modesto homenaje a uno de los mejores directores de la historia del cine, como cinéfilo no es solo una "obligación", sino una necesidad vital dado que estoy hablando del maestro sueco Ingmar Bergman, fallecido estos dias, despues de una larga carrera como director en la cual demostró siempre su maestria, conseguiendo lo que la mayoria solo puede soñar, es decir trascender mediante el arte, el arte que mostraba película tras película, consiguiendo lo que muy pocos han conseguido o conseguirán, filmar con acierto los silencios, las pausas, las emociones de los personajes, cosa que el conseguía con solo una mirada, un movimiento de cámara. Para un servidor, que espera que un dia el sueño de contar historias esté a mi alcance, esto es algo digno de mi admiración, cosa que no otorgo con facilidad, pero que en este caso está mas que justificada ya que estamos ante un hombre que, como todo genio atormentado de las emociones (en alguna ocasión declaró que nuestras relaciones sociales se limitaban a criticarnos entre nosotros, cosa que le llevó al autoaislamiento personal), alcanzó en cada una de sus películas el nivel de obra maestra, un director que de aquí a 100 años, cuando uno abra los libros de la historia del cine, tendrá seguro el honor de encabezar alguna de sus páginas, y además con justicia.
En definitiva, gracias señor Bergman por hacernos soñar, por dejarnos crecer con sus películas.
Para acabar una cita que se ajusta perfectamente a mi visión de la vida y que forma parte de mis favoritas, declarada por Bergman hace bastante tiempo...

"Hacer películas es para mi un instinto natural, una necesidad vital como comer, beber o amar"